miércoles, 6 de mayo de 2009

Josefina

France, l'armée, Joséphine”.
Napoleón Bonaparte, antes de morir el 5 de mayo de 1821.



Ha de tener un verdadero nombre, elegantemente científico y con una taxonomía familiar de las más altas esferas del reino vegetal, pero la llamaré como se le conoce en la región: ¡Josefina!



Había algo que a mi damisela la hacía destacar entre sus amigas, eso que se alcanza a describir mínimamente como atracción. Una evidencia más de que el amor a primera vista puede existir.

¡Dulce, incomparable Josefina, qué efecto extraño tienes en mi corazón!”.



El vivero donde se crió era una sola masa de niebla, con un frío propicio para su naturaleza, y con los cuidados necesarios de un jardinero, más amante que negociante, que entrega a una de sus hijas a un prometedor novio. Llegar a mi casa con ella fue una odisea como la del mismísimo Odiseo, incluyendo hasta una veloz travesía colgados en el parachoques trasero de un campero rural descarpado.

"Te vi sólo a ti, te admiré sólo a ti, te deseo sólo a ti".



Propiciaré los mejores cuidados para ella hasta que el tiempo nos separe, deliciosa agua, aire fresco, noches lunares, un húmedo trapito para sus hojas, una maceta más grande para cuando crezca y unas palabras, como las de Napoleón a su amada:

No pido amor ni fidelidad eternos, únicamente... la verdad, una franqueza ilimitada. El día que me digas ‘te amo menos’ será el último día de mi amor o el último de mi vida”.



Josefina, hermosa flor…
un nuevo amor…

.

3 comentarios:

Andrés Meza Escallón dijo...

¡Qué bonita! ¿Es de sol o de sombra?

MAREÑA dijo...

DIVINA!! creo que necesitas asesoría y el mejor profesional en la materia que conozco es José David Tenorio, mira en este enlace una pequeñísima muestra de toda su colección:
http://www.flickr.com/photos/marena/

Johanna Perez Vasquez dijo...

Wow, no dejan de sorprenderme los hombres que le prodigan tanto cuidado a las plantas, a mí eso no se me da muy bien aunque estoy trabajando en ello.
Hermoso nombre y más aún la flor.

Me quedé con ganitas de verte maniobrando para no caerte del carro con la planta en la mano. Esa foto me faltó.