miércoles, 8 de julio de 2009

¿De nuevo el azar?

En el último apartado de “Pura coincidencia” hablaba de una hermosa mujer a quien conocí tarde y por casualidad… Hace tiempo ya…

En estos días…

El muñequito del semáforo peatonal cambió de verde a rojo. Me apresuré a cruzar la calle mirando por el rabillo del ojo izquierdo la otra esquina donde los apurados carros arrancaron cuando su color apenas era amarillo.

En mi afán de cruzar la calle y por el otro rabillo del otro ojo, miré a una mujer que corría también por alcanzar el otro lado que yo apenas había dejado. Su cabello suelto se movía armoniosamente con sus apresurados pasos.

Seguimos.

Apenas si nos vimos para no chocarnos frente a frente…

Cada uno salvó su pellejo al subir al andén contrario aún agitados…

Unos segundos después, infinitos para mi suerte, mi cerebro al igual que el de Homero Simpson cayó en cuenta: "Un momento…".

Demasiado tarde.

Entre la gente, entre los carros, ella ya no estaba…

.

3 comentarios:

Andrés Meza Escallón dijo...

¡Ough! :)

Alicia dijo...

y es en ese preciso momento es cuando uno se pregunta.. "que rayos me pasa" ?
Mala suerte, quizas y ella era la chica indicada designada para vos por los a veces condescendientes dioses del olimpo

Johanna Perez Vasquez dijo...

Pero como dicen que la ciudad donde vives es un pueblo grande, es probable que la vuelvas a ver pronto.